23 de Julio del 2013

Análisis de Mindjack - PS3

Un nuevo videojuego llega de la mano de Square-Enix: Mindjack. Junto a una jugabilidad bastante innovadora, Mindjack propone poder controlar una entidad que se apodera de las mentes de los humanos para utilizarlos como a uno le plazca. ¿Será este juego capaz de apoderarse de un sobresaliente?

Cerebros y armas

Tomaremos el papel de Jim Corbijn, el protagonista de apariencia japonesa y héroe en el lejano año 2031, inmerso en un mundo peligroso y familiarmente futurista, donde los gobiernos y las corporaciones son malignas al extremo, y sin ningún temor a represalias del pueblo; son capaces de ejecutar asesinatos como si de hormigas se trataran.

Nuestro bonachón agente de la FIA no estará solo en esta peligrosa aventura, teniendo la suerte de ser acompañado por Rebecca, rubia de talladas curvas y un as al mando de la pistola. Juntos deberán abrirse -con la ayuda del control de mentes- paso entre sus enemigosque intentarán asesinarlos sin piedad.

Hasta ahí, bien. Una historia típica sin ningún trasfondo, algo a lo que ya estamos acostrumbrados en este tipo de relatos, y Mindjack no será la excepción.

En la mente equivocada

Es casi insólito que un juego que trata de control de mentes justo haya caído en la equivocada, pero así sucedió. Lo peor que le puede pasar al jugador es comenzar la partida, y eso debido a una jugabilidad de carácter repetitivo y torpe como la de un juego educativo para menores le puede ofrecer a un ya antiguo gamer.

Tenemos en nuestras manos un título de disparos en tercera persona con amplias posibilidades de flanquear a nuestros enemigos mediante el control de mentes sobre cualquiera de los dos personajes principales y los NPC que estén en medio de la balasera; o eso aparenta prometer. La "Inteligencia Artificial" es de lo más cercano que nos encontramos de jugar clásicos de PSOne, con oponentes que se encuentran muy cómodos disparando al vacío durante varios minutos por detrás de una cobertura sin saber que estamos soplándoles la nuca.

No queda en claro cómo puede ser posible que no nos detecten, y es que nuestro camino siempre será un pasillo angosto donde no hay posibilidad que no nos vean. Quizás no son tan tontos como parecen, quizás hasta ellos mismos no quieran ver la realidad y deseen que los maten cuanto antes para ser librados de este tormento.

En relación con los enfrentamientos, nos encontramos frente a un desbalanceado poder de daño en los disparos, ya que nuestros enemigos tienen que recibir un manojo de disparos para morir, mientras nosotros debemos estar abrazados a las paredes por cada tiro que impacte en Jim.

Quien viene a salvar esta horrible jugabilidad es su único punto fuerte: el control de mentes. Mediante una combinación extraña de botones, podremos salir de nuestro portador para ir hacia otro que se encuentre en mejor posición frente a las barricadas que nos cruzamos una y otra vez. Una vez que liquiden a nuestro cuerpo, pasaremos a otro, y así sucesivamente hasta que no quede nadie y acabe la partida.

Solo hay un problema, los controles son incomodos y los NPC inutiles. Al salir de nuestro personaje principal y alojarnos en un secundario que se encuentra aterrorizado por miedo a los disparos, éste último toma coraje y desenfunda una ametralladora del bolsillo de su pantalón para acabar con nuestros enemigos. No solo va a durar vivo lo mismo que Don Mattrick a cargo de Xbox One, sino que también nos meterá en graves aprietos al tratar de volver a nuestro cuerpo original ya que Jim gusta de jugar a las escondidas durante buena parte del tiempo mientras no esté bajo nuestro mando.

Esto nos lleva a una jugabilidad repetitiva, que consiste en caminar, disparar, cubrirse y avanzar de nuevo durante cinco horas tediosas. Si ésta es la piedra angular de Mindjack, estamos en graves problemas.

¡No contaban con mi astucia!

No todo es tan malo, y para suerte de los jugadores hay un componente online en el modo historia que permitirá ingresar a diferentes jugadores que se encuentren conectados a los servidores. De esta forma la historia se vuelve menos insufrible, ya que no estaremos pensando en la trampa en que caímos al jugar Mindjack; siempre hay alguien más.

Quizás no sea lo mejor del mundo, debido a que nuestro compañero puede plantarse detrás de una pared sin dejarnos avanzar, volviendo la partida aún más tediosa de lo que ya era. Pero realmente sirve para solventar varias falencias de nuestra fémina acompañante que usa balas de salva.

Mis amigos me llaman Jim, usted llámeme RoboCop

Gráficamente, el juego nos muestra la peor cara del Unreal Engine 3. Partiendo del pobre diseño de niveles, nos encontramos en un lugar donde todo es cuadrado y con texturas planas, que no da al menos indicios de interacción con el entorno. Nada se destruye, solo aparecen pegatinas mal dibujadas de disparos cada vez que gatillamos nuestra arma.

Claro que los personajes no pueden fallar a la regla, siendo un festín de enemigos iguales entre si que se mueven como si tuviesen ladrillos en los pies. En este caso, lo más grave son las animaciones poco fluidas, llegando a hacernos creer que son simples sprites animados y llevados al 3D.

No hay tiempo para lamentarse, no si aún falta el sonido y los pésimos doblajes. Si bien las animaciones faciales no ayudan para ponernos en contexto y el hecho de tener una historia típica que no da para mucho, la sobre-actuación de los actores de voz es acentuada al extremo, casi como que hubiese estado a cargo de este apartado. Ni siquiera hay música para callar esta desgracia.

Conclusiones

Mindjack se encargó de alojarse en la mente más putrefacta, equivoca y aburrida que podía encontrar. No solo tendremos una jugabilidad repetitiva durante cinco horas donde habrá que disparar y cubrirse una y otra vez sin diversión, sino que absolutamente nada destaca en este juego. Sus gráficos y animaciones son característicos de juegos de PSOne, en materia sonora es lamentable escuchar una charla de principiantes que prestaron su voz para los personajes, y su historia no ayuda para paliar las ganas de golpearnos la cabeza contra la pared durante nuestra travesía a bordo de Jim.

El único componente fuerte que tiene Mindjack es su característica online que nos permite disputar el modo historia junto a otros desgraciados que adquirieron el videojuego al igual que nosotros. Lamentablemente no alcanza para salvar un juego que jamás debería haber salido de las manos de FeelPlus. Square-Enix se condena una vez más frente a un juego pésimo.

Lo mejor

- Su componente online.

- Haber leído este análisis antes de comprarlo.

Lo peor

- Personajes sin carisma.

- Gráficos y animaciones de hace diez años.

- El sonido es vomitivo.

- Juego repetitivo.

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