31 de Agosto del 2023
Análisis de Fort Solis - PS5
En el espacio, nadie te va a hacer correr.
Mucha caminata y poco juego
Fort Solis es uno de esos juegos independientes que parecen borrar la línea entre lo que consideramos indie y triple A. Con muy buenos gráficos, narrativa interesante, aterradores escenarios y un excelente cast de voces y actuación, podríamos estar ante una joya escondida... si no fuese porque de juego, tiene poco y nada.
En sí, Fort Solis se puede catalogar como un walking simulator. Con una historia ambientada en Marte, Jack, un ingeniero, y su compañera Jessica reciben una llamada de auxilio del cercano Fuerte Solis. Jack se dispone a investigar, y al llegar y encontrar a toda la instalación en un cierre de emergencia, decide entrar en el lugar para asegurarse de que todo está bien. Como es de esperarse, nada está bien, y se halla en un lugar completamente vacío y cerrado. ¿Qué pasó con los trabajadores?, ¿quién encendió la alarma y por qué? Preguntas que nos llevarán a una serie de intrigas y misterios de lo que se cocina en el lugar.
Como thriller, la premisa es buena. No muy original, pero buena. Especialmente porque al tratarse de un juego, la narrativa toma elementos que no pueden encontrarse en una serie o película. Sin embargo, los pocos elementos de jugabilidad y una implementación deficiente de los mismos, logran que la gran atmósfera que crean los escenarios se rompa al no terminar de generar tensión. Básicamente, el juego se trata de caminar por los pasillos tratando de encontrar llaves que nos permitan acceder a nuevos espacios.
En el transcurso encontraremos algún que otro puzle, pero son tan sencillos que no llevarán más que unos minutos para el jugador experimentado. También hay varios quick time events, los cuales no tienen incidencia alguna en el desarrollo: podés fallar todos los eventos que se te pongan enfrente, que la vida del personaje nunca correrá riesgos ni la historia se desviará por otro camino (salvo uno solo hacia el final). No son, entonces, más que una excusa para agregar "jugabilidad". Es cierto que el juego tiene más de un final, pero la motivación para obtenerlos es nula.
Pero tal vez lo peor que tiene, es que no exista una función de correr y sprintar. Caminás muy lentamente durante toooodo el juego, y si bien no se trata de un juego largo, puede ser bastante cansador si sos completicionista y querés buscar todos los archivos del juego (lo único realmente atrayente desde lo jugable). Realmente no dan ganas en absoluto de volver sobre tus pasos.
Conclusiones
Fort Solis tiene más ganas de ser una película o serie que un videojuego. Es una lástima que todo el amor que se le ha puesto a la construcción de escenarios y a la narrativa, se termine cayendo porque no hay un solo elemento jugable que valga la pena. Si tan solo existiese la chance de que al fallar los QTE, incluso si el personaje no muere, la historia tomase otro camino y nos permita, por ejempo, explorar diferentes secciones del Fuerte, entonces otra sería la experiencia. Pero lo cierto es que no vale demasiado la pena gastar dinero por 4 o 5 horas en las que sólo tenés que caminar, por muy buena que sea la atmósfera, la narrativa o el cast de voces.
Lo mejor
· Las actuaciones.
· Los escenarios.
Lo peor
· La jugabilidad (o falta de ella).
· No poder correr o al menos moverte un poco más rápido.
· Es demasiado corto.
· Nulo valor de rejugabilidad.
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