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Styx Shards of Darkness
Leandro Bordino
Redactor
Leandro Bordino / Cloud

Soy amante de los videojuegos desde que tengo memoria y disfruto mucho escribiendo sobre ellos. La música es mi otra pasión; soy tecladista y obvio que ya saqué varias piezas de Nobuo Uematsu :D Leer más »

Email: lbordino@playnomore.com
06 de Abril del 2017

Análisis de Styx Shards of Darkness - PS4

Styx está de regreso con otra aventura de sigilo, escenarios más grandes y muchos insultos. Les contamos si vale la pena.

A la hora de crear una nueva IP, quizás algo que se le complica a algunas empresas es inventar un protagonista lo suficientemente carismático como para que en unas horas nos caiga bien y lo recordemos. Lo divertido que resultan los comentarios e insultos de Styx es una de las razones por las que seguramente llega esta secuela a nuestras manos. Obviamente, en lo jugable la primera aventura nos dio buenas dosis de sigilo, pero el condimento especial lo tiene el odioso goblin. Lo mejor, aunque a veces repetitivo, es que cuando perdemos Styx se dirige al jugador para insultarlo, algo que recuerda a la franquicia Batman Arkham.En esta oportunidad, tras los hechos del primer juego, el ladronzuelo se encuentra haciendo un trabajo, y al regresar a su choza se ve rodeado por la organización "Matanza", quienes se dedican a cazas goblins. Para su sorpresa, la líder no se encuentra allí para aniquilarlo, si no para ofrecerle cooperar con ella y a cambio obtener Ambar. Como primera misión deberá robar un objeto valioso, pero pasa algo inesperado cuando está a punto de hacerlo. A partir de allí nos espera una aventura de la cual no voy a revelar más.

En un momento en el que no todo juego AAA de aventura nos trae una historia tan atractiva, se puede decir que la secuela de Styx es correcta en argumento. Ofrece algunos personajes interesantes, un mundo bastante detallado y algunos giros entretenidos. No es el guión más atrapante del año pero funciona para mantenernos enganchados las aproximadamente 12 horas que nos dura.Comenzando a hablar sobre su jugabilidad, Styx será muy bocón pero claramente no puede enfrentarse mano a mano con sus enemigos. O al menos es casi imposible salir con vida. Por eso este juego se inclina casi en su totalidad por el stealth, diferenciándose de algunos donde nos ofrecen el camino del sigilo o el de la acción directa. Si un enemigo nos descubre, no dudará en querer matarnos, y el único rayo de esperanza es cubrirnos de su ataque en el momento preciso para poder contraatacar; pero con más de un enemigo es una muerte segura. Así que esta aventura es más para el que le gusta avanzar entre sombras.

Styx no solo cuenta con la ventaja de ser bajito y sumamente sigiloso, tiene algunos trucos bajo la manga. Por ejemplo, limitadamente por el uso de Ambar, podemos hacernos invisibles por unos segundos. Si sabemos aprovechar esto podemos salvarnos de partes que requieren bastante precisión. Otro hechizo interesante es la posibilidad de clonarnos para que el enemigo se distraiga, o para poder explorar sin miedo a que nos vean. Por supuesto, nos encontramos con elementos clásicos del género, como la muerte silenciosa por la espalda, esconder cuerpos, utilizar objetos para distraer y más. O también hay algunas especialidades del goblin, como escupir sobre el agua que un soldado está por tomar para que caiga envenenado. Tenemos bastantes herramientas a la hora de infiltrarnos.Lo que realmente hay que reconocerle a Cyanide Studio, quienes insistieron con que esta secuela vendría con escenarios mucho más amplios, es eso mismo. Nos vamos a topar con lugares muy grandes, y con diferentes caminos. Casi que por momentos hasta podés perderte, ya que no contamos con un mapa que nos guíe. Si vas directo al objetivo principal, casi siempre vas a terminar "haciendo cualquiera". Es decir, saltando por cualquier parte, improvisando, porque el juego te lo permite y eso es muy divertido. Gracias a la agilidad de Styx, a veces podemos tirarnos a lugares lejanos (ojo, no siempre sale bien), y crea una gran libertad cuando estamos pensando como nos vamos a cumplir la misión.

Las misiones por lo general nos hacen ir de un punto a otro. No existen muchas variantes, quizás siendo una de las más divertidas el tener que llevar un cuerpo hasta el objetivo sin que nos vean. En donde aparecen los desafíos es en las misiones secundarias. Cada mapa nos ofrece algunos retos, como quitar todos los carteles de "se busca" con la cara de Styx, o asesinar a determinado guardia. Está en uno cumplir o no estos recados. Y si eso no te pareció lo suficientemente complicado, si lo son los récords a marcar en cada nivel. Por ejemplo, se nos pide terminarlos antes de un tiempo específico, que puede ser de solo 10 minutos.Hagamos o no las misiones extra, o decidamos o no explorar, va a cambiar bastante la experiencia de Styx. En determinados lugares vamos a encontrar unas mesas para mejorar nuestras habilidades, y para crear ítems. Si no exploramos, no tendremos ítems que crear. Y si no ganamos experiencia, no llegaremos a completar su árbol de habilidades. Éste tiene cinco ramas diferentes y se pueden desbloquear algunas cosas muy interesantes, pero ciertamente no todo es fundamental para poder ganar el juego. Aun así es un buen agregado y se robará nuestra atención por unos minutos para personalizar al goblin a nuestro gusto.

Como no pueden faltar en este tipo de títulos con cierta libertad, a medida que jugamos se van sumando a la lista una serie de bugs curiosos y hasta divertidos. Por suerte solo una vez me ha tocado caer al vacío, el resto fueron risas como soldados atravesando paredes o ese tipo de cosas. Lo que no da gracia es cuando la jugabilidad te traiciona, con un mal salto o problemas similares. No aparecen todo el tiempo, pero para estar atentos.Restan algunas cosas interesantes para mencionar. Por ejemplo, como siempre sucede en este género, la IA es algo demasiado importante. Hay que admitir que por momentos sorprende y por momentos se pone en ridículo a sí misma. Es algo natural, pero que no se puede dejar pasar. A veces nos escondemos y nos encuentran hagamos lo que hagamos, demostrando mucha inteligencia. A veces les pasamos a los enemigos por al lado y no nos ven, demostrando mucha ceguera. También cabe dar lugar a los bosses, que son poquitos pero bastante interesantes teniendo en cuenta que es un juego de sigilo y no nos podemos enfrentar directamente a ellos. Por último, se ha agregado un muy divertido modo cooperativo online, en el que podemos pasarnos toda la aventura con un amigo, usando a dos goblins. Esto da lugar a muchas estrategias nuevas, y además aumenta la dificultad para que no se haga demasiado fácil. Eso también vale la pena decirlo, el juego cuenta con cuatro niveles de dificultad.

Conclusiones


Styx Shards of Darkness es una muy buena secuela, y definitivamente ha mejorado mucho en cuanto al juego original. Si buscan una nueva aventura de sigilo, con un personaje que se logra ganar el cariño del público, es una gran opción. Cuenta con cuatro niveles de dificultad, misiones secundarias, modo cooperativo online y algunos bosses. Por otro lado, la IA a veces sorprende y a veces es ridícula. Para tener en cuenta.


Lo mejor
· Styx.
· Escenarios muy grandes.
· Modo cooperativo online.
· Cosas extra para hacer.

Lo peor
· Por momentos la IA.
· Muchos bugs que corregir.
· La jugabilidad a veces nos traiciona.
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Ficha del juego
Styx Shards of Darkness
Galerías
Styx Shards of Darkness
  • Empresa
    Cyanide Studios.
  • Origen
    Francia.
  • Fecha de lanzamiento
    14 de Marzo de 2017.
  • Plataformas
    XONE, PS4, PC.
  • Descripción

    Luego de un primer título correcto y con un paso un poco desapercibido entre el público, llega su secuela. Esta vez deberemos infiltrarnos en la ciudad de los elfos negros, llamada Körangar. Prometen que todo será mejorado, en especial la jugabilidad, con más posibilidades que antes.